En esta etapa final del preschool, fortalecemos las competencias académicas, emocionales y sociales que preparan a los niños para la transición al colegio. A través de proyectos integrales, fomentamos la autonomía, la responsabilidad y el pensamiento crítico, asegurando que cada niño se sienta seguro, feliz y listo para nuevos retos.
A través del juego, los niños comprenden conceptos de cantidad, forma y medida. Aprenden a razonar, comparar y resolver pequeños desafíos con alegría y confianza.
Fomentamos el gusto por la lectura y la escritura mediante cuentos, dramatizaciones y ejercicios creativos que fortalecen la comprensión y la expresión escrita.
Promovemos la colaboración y el respeto por las ideas de los demás. Cada proyecto grupal refuerza la empatía, la comunicación y la resolución pacífica de conflictos.
Cada niño es único. Por eso, nuestros docentes y psicopedagogos acompañan de forma individual el progreso de los estudiantes, identificando fortalezas y oportunidades para potenciar su desarrollo emocional, cognitivo y social.
“Estamos muy agradecidos con el equipo del preschool. Isabela aprendió a leer, ganó confianza y ahora está emocionada por empezar el colegio. Fue una etapa maravillosa.
Ver a Nicolás tan feliz y seguro es la mejor recompensa. En Kínder no solo reforzó lo académico, también aprendió valores y amor por el aprendizaje